Después de diez años en que empezaron las gestiones para arreglar nuestro templo, periodo que encierra
muchos contactos, muchas
ilusiones y muchas desilusiones.
Por fin, llegó el momento en que todo lo pasado ha tenido su fruto. Ese trabajo realizado se ve compensado con la firma técnica del contrato para el arreglo de la iglesia y que pasado diez meses que duren las obras, veremos si Dios quiere, el templo restaurado.
Por fin, llegó el momento en que todo lo pasado ha tenido su fruto. Ese trabajo realizado se ve compensado con la firma técnica del contrato para el arreglo de la iglesia y que pasado diez meses que duren las obras, veremos si Dios quiere, el templo restaurado.
Agradecemos a D. Andrés, nuestro párroco, por todo su
esfuerzo, su trabajo,su tesón y su confianza en Dios
que ha manifestado, hasta conseguir
que esas obras fueran
una realidad, para la restauración del
templo. Gracias.
Se destaca, que durante este tiempo,
nuestro párroco ha estado apoyado por sus feligreses.
Hemos
de ser conscientes que el importe de la restauración es muy elevado. Por esos
desde estas líneas, llamamos a la responsabilidad y a la generosidad de todos.